Llegada a USA y rumbo a Las Vegas.

Ya comenzamos a narrar este viaje por la Costa Oeste de USA, como todo viaje comienza con unas interminables horas entre vuelos y espera en el aeropuerto. Pero lo mejor es que siempre llevamos las maletas llenas de ilusiones y expectación sobre lo que nos deparará esta nueva parte del mundo.

Desde el aeropuerto de Gran Canaria ya se podía apreciar que no nos iban a faltar ganas para llegar y no parábamos de hablar de toda la ruta que habíamos planificado, pero sobre todo que no hubiera ningún retraso en los vuelos.

Teníamos contratado nuestro billete con American Airlines pero el vuelo hasta Boston fue operado por Iberia. Tras unas 8 horas de vuelo hicimos una escala de unas tres horas en el aeropuerto de Boston. Tuvimos que pesar por la aduana y recoger las maletas para cambiar de avión (a pesar de que nuestro billete era a Los Ángeles). Las maletas las dejamos en una zona para transfer sin ningún problema. Habíamos leído tanto sobre el control que estábamos un poco preocupados por la demora ( hablaban de largas colas) y por el exhaustivo control de los agentes de aduanas. Solo puedo decir que nos fue genial, rápido y sin problemas. USA nos recibía con los brazos abiertos. Tras comer algo en el aeropuerto volvimos a coger un avión, esta vez de American Airlines, y tras 6 horas de vuelo (nunca olvidare la cara de mi cuñado cuando se dio cuenta el tiempo que nos quedaba en esa avión ) llegamos a la gran ciudad.

No pudo con nosotros el cansancio y desde que bajamos del avión pusimos los cinco sentidos para recoger las maletas y salir del aeropuerto.

Para llegar a la zona de alquiler de coches  subimos a un bus de la compañía Dollar y nos llevó directamente a las oficinas, nada mas llegar nos dimos cuenta de eso que dicen: " En America todo es a lo grande". Un mostrador inmenso y mas de 15 personas para atenderte, que lujo!!

El comercial de Dollar intentó meternos de todo (seguro extra, paquete de extras e incluso una muy buena oferta para cambiar a un modelo superior de coche) pero nosotros nada de nada.

Como curiosidad pudimos elegir entre mas de 10 coches de la categoría contratada, y ahí estábamos subiéndonos en todos (Toyota, Hyundai, Ford, Chevrolet) al final nos decidimos por el Dodge Avenger. Tras meter todo el equipaje en el inmenso maletero pusimos dirección hacia el hotel con nuestro fiel GPS.

En menos de 30 minutos ya habíamos llegado al Motel 6, el cual tenia un 7eleven justo al lado y aprovechamos para comprar algo para cenar,  y repetimos para el desayuno a la mañana siguiente. Ya en marcha y tras el jet lag ( despiertos desde las 4 de la mañana) pusimos rumbo hacia la primera parada del día y sin salirnos de la ruta programada hicimos una escala en un Wal-Mart, todo un descubrimiento para llenar nuestra despensa de provisiones, allí compramos nuestra primera neverita para el viaje (y digo primera porque nos pasó de todo, pero ya os lo contaré más adelante)

Por fin llegamos a nuestra primera parada programada en el viaje: Calico. Es un histórico pueblo minero que en la actualidad se ha transformado en una "atracción turística" que emula a los famosos pueblos del oeste americano. Hay ejemplos de los edificios más típicos como el salón, la herrería, tienda de alimentación, establo, banco, etc.

                 

En la parte alta del pueblo se sitúan las casas de los mineros y con un pequeño tren se puede visitar los túneles de una mina original. Los cuatro coincidimos que esta visita, aunque no está mal del todo, es totalmente prescindible si vas con el tiempo ajustado.

Después del calor que pasamos en Calico y a solo 5 minutos en coche se encuentra el famoso Peggy Sue´s 50 dinner, fundado en 1954 y que sigue manteniendo el estilo de aquellos restaurantes de carreteras de los años 50-60. Disfrutamos de unos suculentos platos que rebozaban calorías, hamburguesas, papas, ensalada y como no, un fantástico batido. 100% recomendable.

Con las pilas ya cargadas pusimos rumbo a Las Vegas, teníamos por delante menos de 3 horas y  muchas ganas de pisar "la ciudad del pecado". Atravesamos el Desierto de Mojave con una paisaje desértico y altísimas temperaturas en el exterior. También cuenta con varias áreas de servicio donde poder realizar alguna parada para el descanso.

La verdad que en la entrada ya impresiona pero desde que iniciamos el ascenso por Las Vegas Strip rumbo a nuestro hotel pudimos comprobar todo lo que nos esperaba en los próximos días. Antes de instalarnos paramos en el Hotel MGM donde teníamos que recoger las entradas que teníamos reservadas para el Circo del Sol, bueno eso ya lo contaremos.

Por fin nos instalamos en nuestro hotel de Las Vegas pero a partir de aquí ya os lo contaremos en el siguiente post que no tendrá desperdicio.